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La dislexia es una dificultad significativa y persistente que afecta a las HABILIDADES  asociadas a la lectura y a la escritura, especialmente en la discriminación fonológica, la descodificaciones, la memoria a corto plaza, la percepción y la secuenciación. Se manifiesta como una dificultad de automatización de la lectura, problemas de ortografía y, a veces, también del cálculo aritmético. 
Las causas de la dislexia no deben buscarse en el Cociente Intelectual, ni en la situación emocional o sociocultural de la persona afectada.

Diagnóstico

Gracias a los conocimientos adquiridos a lo largo de estos años y nuestra experiencia en este campo, así como el trabajo colaborativo e interdisciplinar entre los diferentes profesionales que han tratado y conocen a cada niño, podemos hablar de un diagnóstico temprano, que dependiendo de la personalidad y características de cada caso,
se pueden prever desde muy temprana edad, de 2 a 4 años, en Jardín de infancia y Educación Infantil.

A partir de 4 años, y hasta los seis años, el Diagnóstico es crucial para el desarrollo posterior en el aprendizaje del alumno.

De seis a doce años, el diagnostico de la dislexia, conlleva un la matización de grados y la necesidad de adaptación del aprendizaje al contenido curricular de la etapa y curso académico del alumno.

A partir de los doce años, el alumno se enfrenta a un diagnostico, que aun realizándose con retraso, su madurez intelectual y de desarrollo evolutivo nos compensará el tiempo perdido.

El diagnóstico tardío supone la asimilación de una nueva forma de entender el aprendizaje que supone toda una liberación para el alumno, y una nueva forma de aprender a aprender, sin barreras, y con la confianza de conseguir excelentes resultados  través de las nuevas metodologías del aprendizaje.

Tratamiento

En nuestro centro trabajamos con un  método propio basado en las teorías constructivistas y del aprendizaje colaborativo, realizando una intervención global del niño.

Trabajamos no solo en la  adaptación del aprendizaje en el aula, sino también en una forma nueva de entender la realidad cotidiana, y la comprensión y colaboración familiar, desde muy temprana edad, previniendo problemas futuros de trastornos de conducta, adaptación social e integración.
Siempre en colaboración con familia y con el centro educativo, atendiendo a las necesidades del niño y de los diferentes contextos que interactúan con este en su desarrollo evolutivo.

En alumnos diagnosticados de dislexia, en primaria, el tratamiento es de adaptación metodológica a través de  Nuevas Metodologías, incluyendo en ellas las Nuevas Tecnologías y los avances que en la sociedad de la Información y de la Comunicación aparecen, donde tan bien se desenvuelven estos alumnos.
Les ayudamos a comprenderse, a aceptarse, a lograr una autoestima que les de alas para alcanzar sus metas.

El idioma ya no será un obstáculo en su camino, en la medida que a través de las Nuevas Metodologías logren por ellos mismos a través de un conocimiento estructurado y significativo aprender a aprender.

Los alumnos que acuden a nosotros en etapa de pre adolescencia, adolescencia y juventud, requieren un tratamiento personalizado y adaptado a su desarrollo evolutivo y su perfil psicológico, de modo que actuamos todo el equipo multidisciplinar de forma conjunta, incluyendo el pedagogo, el psicopedagogo, psicólogo y profesor especializado, en estrecha colaboración, creando metodologías personalizadas a cada tema de aprendizaje que requiere atención específica, atendiendo a sus necesidades afectivas y proveyéndole de herramientas para mejorar su autoestima y su competencia emocional y afectiva.

Prevención

La prevención se consigue a través del conocimiento, de informar y mostrar a padres y educadores cuales son los síntomas de una posible dislexia en un niño, desde que empieza a relacionarse con el mundo exterior, en todas sus etapas de desarrollo, en todos sus contextos, para que puedan detectar la necesidad de un diagnóstico lo mas pronto posible y su consiguiente actuación.

En caso de la detección temprana, hacia los tres y cuatro años, se trata de una labor de investigación-acción que realizamos a través de la espiral de Lewis, y que supone un seguimiento y adaptación continua al desarrollo y circunstancias de cada niño y de los contextos en los que interactúa.

La prevención se consigue a través del conocimiento, de informar, mostrar a padres y educadores, cuales son los síntomas de una posible dislexia en un niño, desde que empieza a relacionarse con el mundo exterior, en todas sus etapas de desarrollo y en todos sus contextos, para que puedan detectarlos de forma temprana.

Cuando el diagnóstico se realiza en primaria resulta mucho mas sencilla la intervención y la prevención para lograr las metas de consecución de competencias que los centros educativos les exigen a medida que los cursos avanzan.

Por ello, si bien en Secundaria y Bachiller realizamos un tratamiento de choque, para conseguir las metas y el restablecimiento de la normalización lo antes posible, en Primaria contamos de un tiempo clave para la adaptación metodológica, que el alumno de estas edades agradece y necesita para preparar sus futuros retos, tanto emocionales como relaciones sociales, integración y académicos.