El concepto de trastorno en si mismo encierra la idea de desequilibrio, por lo que en lo referente a la conducta en etapas de niñez y adolescencia, podríamos definirlo como un desequilibrio personal-emocional que se refleja en una alteración de la conducta de manera continuada y que repercute en el sujeto que la sufre y en todos sus contextos, en la medida que esta deriva de leve a moderada y grabe.
Es uno de los trastornos que mas influye en todos los actores implicados, hermanos, padres, amigos, compañeros, profesores, …
Afectando de manera individual al propio sujeto, de diferentes formas: abandono, falta de higiene, o todo lo contrario, excesivo perfeccionismo, auto exigencia en referencia con el resto, etc..
En el plano familiar, aislamiento , negación, pasotismo, enfrentamiento, etc. en el contexto académico, puede haber o no aislamiento social, pero si confrontación
A nivel académico, apruebe o no. Mal comportamiento, agresividad verbal y/o física hacia compañeros y/o profesores, pasotismo.
A nivel social, aislamiento total, pertenencia exclusiva al grupo con el que se identifica dentro de reglas autoimpuestas que atentan contra su salud física y emocional y pueden incluso atentar contra las de la familia, amigos y sociedad.
Son muchos los factores que pueden determinar la existencia de un trastorno de conducta, pero siempre implica un perjuicio en la salud psíquica o física del individuo que repercuten directamente o no, en los diferentes contextos con los que interactúa el sujeto.
Causas y tratamiento
Es muy importante en este tipo de trastornos comprender las causas específicas de cada individuo ante todo, ya que no hay un individuo igual a otro, ni una familia igual que otra, pueden compartir el contexto social.
Los medios de comunicación se encargan de homogeneizar las necesidades consumistas de dichos individuos.
Utilizamos el modelo construccionista conjunta del aprendizaje, en un espacio de colaboración en la que todos los contextos estén implicados, escolar, familiar e individual con el Centro, y dentro de este las disciplinas que se requieran: La pedagógica, atendiendo a las modificaciones metodológicas de estudio adaptadas a la personalidad y características culturales del individuo, la psicológica, encarga de restablecer el equilibrio psicológico del paciente, ayudarle a afrontar las necesidades que tiene o cree tener, conocerse así mismo , entender a su familia, que suele ser el escollo mas difícil para los preadolescentes y adolescentes, comprenderlas y rehacer el diálogo entre los actores implicados en el contexto familiar, de modo que se les den herramientas para la comprensión y el desarrollo de la comunicación entre todos ellos, guiándolos hasta que deje de ser necesario.
Tal modelo supone la inmersión total del educador en la sociedad contemporánea, con todo lo positivo y negativo que esta acarrea, como dice Philippe Meirieu,(1983) : “lo esencial de una educación democrática consiste en aprender a hacer en conjunto”, “el aprendizaje del respeto por el otro”, “no vivirlo al otro como un peligro sino como un ser a la vez semejante y distinto, frente a la “crisis de valores”.
Pero los aspectos sociales que conllevan la era capitalista y tecnológica, que forjan nuestro presente, el consumismo como vía de satisfacción, las falsas expectativas de la publicidad, todo ello genera a través de los medios de comunicación, “el ser a través del tener”. Fromm afirma que “nuestros juicios se encuentran deformados porque vivimos en una sociedad que tiene como pilares de su existencia la propiedad privada, el lucro y el poder. Adquirir, poseer y lucrar son los derechos sagrados e inalienables del individuo en la sociedad industrial”, sociedad hoy tecnológica y en la que la comunicación tiene el poder de hacer presente todo lo que sucede, la momentaneidad, siendo ella misma la comunicación un poder capitalizado porque quien la posee es el dueño absoluto y tiene poder pleno para privar a los demás del uso o gozo de lo que desee.
Estas normas moldean el carácter de todos los miembros de la sociedad incluidos nuestros niños. Vivimos en una sociedad individualista: prima el deseo de adquirir propiedades, conservarlas y aumentarlas, obtener ganancias, y los propietarios son admirados y envidiados como seres superiores (famosos, deportistas, etc.) pero la vasta mayoría no tiene propiedades en el “sentido real del capital”. Fromm hace una pregunta:¿Cómo pueden satisfacer o enfrentarse a su pasión de adquirir y conservar sus propiedades, los que no tienen propiedad alguna?
Y la respuesta se encuentra en “el algo” que todos disponemos, desde el cartón con que se tapan en nuestras calles los que menos tienen hasta todo lo que rodea nuestros hijos y lo consideran suyo por derecho propio.
Esta crisis de valores que engorda el consumismo , nuestros hijos la viven desde que comienzan a verbalizar.
En esta sociedad de la comunicación y de la tecnología, nuestros alumnos e hijos son los primeros aprendices de esta nueva era que supone la alfabetización digital, y que crea una brecha digital y cultural generacional, entre padres e hijos, alumnos y profesores.
Podemos realizar un paralelismo con la revolución de la imprenta por Gutenberg, en 1440, supuso el comienzo del acceso social al conocimiento a través de la lectura generalizada, y no a beneficio de unos pocos privilegiados, pero también supuso la necesidad de aprender a leer y escribir para poder acceder como instrumento al conocimiento y a los cambios que social y tecnológicamente provocó.
Pues bien, actualmente nuestros hijos y alumnos disponen de herramientas tecnológicas, así como de todo tipo de instrumentos: Telefonía móvil, internet, videojuegos, etc.
Emprenden su camino del conocimiento en el uso de herramientas que para los mayores es un camino nuevo del que necesitan formación en ellas para poder adaptarse.
La falta de adaptación por parte de algunos de los ámbitos que acompañan el desarrollo vital de los niños y jóvenes de finales del XX y comienzos del XXI produce una brecha de comunicación que si en la socialización primaria no se nota apenas, llegados a la socialización secundaria, en la adolescencia, es muy difícil que un padre, sin lo que yo he llegado a denominar, conocimiento de la necesidad de “comunicación emocional comprensiva” hacia su hijo a lo largo del desarrollo evolutivo en todas sus etapas de crecimiento e impregnación cultural y emocional.
A veces, sin ningún tipo de alfabetización digital es imposible pueda entenderse con un adolescente sumergido en su contexto social y grupal.
Nuestro adolescente busca el reflejo de sí mismo en los grupos fuera del contexto familiar que le doten de la tan necesitada búsqueda de independencia, pero por una parte el desfase en la cultura de la comunicación de su familia, que le hace sentirse portador de una información de valor superior, y por otra la necesidad de acceder a todo lo que le ofrecen dicho medios de comunicación, el consumismo como vía de satisfacción, las falsas expectativas de la publicidad, todo ello generado a través de los medios de comunicación, “el ser a través del tener”.
Si la familia no tiene, o no le da, entonces no es nada, no vale nada, para él, y se produce una frustración y rechazo, que cristaliza en agresiones verbales tanto en el contexto escolar, como en el familiar. En consecuencia una Crisis existencial que se manifiesta en la conducta.
Los aspectos sociales que conlleva nuestra era capitalista y tecnológica, que forjan su presente, y les retornan al contexto familiar y escolar como dependientes absolutos y débiles, hacer caer a los más débiles o menso preparados para afrontar su presente en aquello que se les prohíbe por norma ( alcohol, drogas, etc.) Produciendo una terrible CRISISde identidad, y de absoluto “pasotismo”, que se traduce en el fracaso escolar, en sus adicciones, con el flagrante deterioro físico, y en agresividad hacia todos los que formamos partes del sistema de contextos donde el adolescente se mueve.
La conclusión a este respecto es que es necesaria una formación continua del contexto familiar y escolar, así como una colaboración entre todos los ámbitos en el que el individuo aprendiz se mueve ,Cardús nos dice: “La educación ha de extremar la atención que presta a la formación del carácter de la persona. Para plantar cara a un escenario de incertidumbre social personas de una gran fortaleza para seguir avanzando a pesar de la falta del apoyo que brindan lascertidumbres que, en otros tiempos, habían señalado qué camino”
Pero está en nuestras manos , educadores y padres, el darles herramientas para enfrentarse a la agresividad del sistema , no podemos inculcar la idea de el maestro Eckhart de no tener nada y permanecer abierto y vacío, no permitir al “ego” ser “ un estorbo en nuestro camino, como condición para lograr salud y fuerza”, en el sentido estricto, pero si podemos educar en la idea de que “el lujo es un defecto, tanto como la pobreza, porque el lujo se apoya casi siempre en el sudor de otros, iguales a nosotros pero que viven en la desigualdad social. Nuestra meta debería consistir en que entiendan y asimilen que ser mucho es más importante que tener mucho. Si comprenden que “tener y ser son dos modos fundamentales de experiencia y son las fuerzas que determinan la diferencia entre los caracteres de los individuos y los diversos caracteres sociales”.
No es una utopía, es posible mediante la formación, porque estoy de acuerdo como Rousseau y como Aristóteles consideraban “la educación como el camino idóneo para formar ciudadanos libres conscientes de sus derechos y deberes en el nuevo mundo que se estaba gestando” (1762), casi 3 siglos después opinamos lo mismo, el ser humano a través del desarrollo de la civilización debe evolucionar para adaptarse a los nuevos tiempos mediante una renovación profunda de la acción educativa, mediante una educación en valores. Cardús (2007) afirma “somosuna sociedad del conocimiento, no por nuestros méritos sino por esa tradición de pensamiento racional que ha permitido un desarrollo científico y humanista de un valor incalculable para nuestro proceso de civilización.La crisis actual de la tradición ilustrada conduce a un peligroso aumento del esoterismo y de la irracionalidad que se mezcla de un modo incongruente con los conocimientos racionales, sin posibilidad de discernimiento”. Rousseau decía que las diferencias entre los niños y los adultos son para bien, el niño aprende a partir de motivaciones y sensaciones, somos los adultos los que debemos de responsabilizarnos en encauzar la inmersión progresiva, significativa, mediante valores que sean herramientas y normas como instrumentos para enfrentarse su realidad ( el detalle que nombra Meirieu, sobre la necesidad del saludo, el saludo como valor de igualdad y añadiría norma de educación).
El modelo construccionista significativo inmerso en su realidad y adaptado a su individualidad y a sus circunstancias sociales en atención a la diversidad, como realidad que hoy en día debe de afrontar la igualdad social.
Dentro de la educación conocer, respetar y valorar las diferencias psicosociales y culturales del alumnado, y evitar situaciones de discriminación” pero esta es una tarea ardua cuando se trata de contemplar la adaptación del aprendizaje a la individualidad del alumno, sin excluir a nadie y con los valores del respeto y la tolerancia, así como la dignidad del alumno. Es necesaria profesionales que promuevan innovaciones educativas, dentro de un sistema comprensivo, integrador y multicultural. , pero para que puedan desarrollar su trabajo necesitan de estructuras organizativas flexibles y dinámicas, y favorece situaciones de colaboración, e interdependencia positiva y cooperación.
En palabras de Meirieu (1998) “Hay el peligro, al descubrir la dificultad de transmitir saberes de modo mecánico, de caer en el despecho y el abandono. Eso sería tomar la decisión de mantener deliberadamente a alguien fuera del círculo de lo humano; sería condenarle, por otra vía, a la violencia. Por eso es tan grave alegar la dificultad de “enseñar” a determinados alumnos para justificar una renuncia educativa a su respecto”.
Cuando dentro del contexto escolar nos encontramos con alumnos con dificultades, estos, en la mayoría de los Centros educativos son rechazados como alumnos por qué no van a producir los resultados óptimos que el centro necesita para publicitarse, nos persigue el capitalismo, en su vertiente más deshumanizada. Por otra parte aquellos que por sus características culturales propias presentan rasgos que rompen la homogeneidad de del núcleo educativo, son excluidos de una manera u otra. Núñez afirma: Entendemosla exclusión como pérdida de las posibilidades de articulación e incidencia en la actualidad de época, quedando la socializad restringida a los límites de un gueto.
Se produce una pérdida de la dignidad de la persona, una sumisión pasiva al efecto de segregación social (efecto de bucle iterativo: la persona queda fijada al lugar que se le asigna), aunque haya estallidos puntuales de violencia”
Hay muchos tipos de exclusión en nuestro sistema educativo que atentan contra el principio de atención a la diversidad, pero que solo el profesor puede desde su lugar privilegiado de actor directo más próximo al individuo: 1º, tomar las medidas adecuadas, para ello necesita del conocimiento y la formación continua, aprender a, analizar sus contextos y actores, diagnosticar el problema, y aprender a colaborar con todos los ámbitos que rodean al individuo, sabiendo que no está solo en esta ardua tarea, que el orientador junto a él pueden involucrar a todo el sistema en corregir , modelar, canalizar todo tipo de conflictos que nacen de situaciones de desigualdad.
Pero “se trata de repensar el de la igualdad de oportunidades y el de inserción como ejes sobre los que reconstruir el tejido social, en el que el derecho a la igualdad sea un operador que regule la diversidad”, porque cada alumno que se deja atrás, por la ignorancia o consentimiento del ámbito familiar sufre dos abandonos cruciales en la etapa de su vida en la que se enfrente a sus dificultades de homogenización con el grupo ( sea superdotado o debajo coeficiente intelectual), el de la baja autoestima y el rechazo social que suele aceptar con introversión, produciendo dos tipos de manifestaciones de conducta más generalizadas:
conductas disruptivas, con agresividad hacia los que percibe como una amenaza hacia su “yo” ,y el de aquellos que lo viven en completo silencio, su “yo” se encierra en sí mismo y se bloquean sus capacidades, hasta producir un estado de discapacidad absoluta para desarrollarse .
Y por otra parte como consecuencia de todo esto la estigmatización por parte del grupo al que pertenece. Contra esto estoy totalmente de acuerdo con lo leído en el art. De Nuñez hay que luchar, sin desmoralizarse, sin aflojar, sin dar un respiro a los que por (intoxicación ideológica ambiente…) etc. Hacen daño a los más débiles de nuestra sociedad, los hacen débiles para marginarlos y no verlos si es preciso, porque lo que no se ve no existe. Pero nuestras aulas, nuestras vidas están llenas de heterogeneidad, y si Einstein no hubiera perseverado a pesar de ser “judío” en su momento histórico y disléxico, al ser marginado como fracaso escolar, hoy nuestra ciencia y cultura serian diferentes. El nos dio una pista:
“La imaginación es más importante que el conocimiento, el conocimiento es limitado, la imaginación rodea al mundo” (Einstein, 1921) y Edison nos dio otra pista muy conocida:“genialidad y creatividad se consiguen con mucho esfuerzo y perseverancia: “90% transpiración y 10% inspiración”.
Soy optimista con respecto a los valores de esta nueva generación, en cuanto que con nuestra ayuda y gracias a las dificultades que atraviesan y crecerán y como diceBachelard,“…cada acción, por simple que sea, quiebra inevitablemente la continuidad del devenir”
Dicho devenir a de ser muy enriquecedor porque muy duros son los tiempos y los conflictos que nuestros alumnos e hijos deben superar para llegar a ser los creadores del mañana.
Desde nuestro Centro aceptamos el reto de ayudar a estos niños, adolescentes y jóvenes a encontrarse consigo mismos y afrontar sus propias dificultades para manejar cada situación en cada contexto desde el dialogo y la reflexión porque encontrando las causas, podemos diagnosticar el problema que causa la alteración de la conducta hasta el trastorno en sí mismo.
En los casos de alteración de conducta la colaboración siempre implica a la familia y al contexto social , amigos, compañeros, y por supuesto al contexto escolar si este se encuentra afectado. Pero entendiendo el sufrimiento del individuo en primer término, y mitigándole a través de terapias cognitivo conductuales.
Le daremos herramientas con las que aprender a afrontar su vida y aprender a vivir en su realidad dejándole sin renunciar a sus sueños e ilusiones.
Por otra parte en ciertas edades preadolescente y adolescentes la orientación profesional es significativamente importante.
El conocerse a si mismos y aquello que realmente les interesa, lo que saben mejor hacer y mas les gusta, les ayudará a trabajar en aquello que les hace felices.
Darles expectativas de futuro les ayudará a afrontar el presente con optimismo y con metas y objetivos claros.
En nuestro Centro les daremos esta Orientación Profesional, dese de la opción libre individual de elegir si así ellos mismo lo desean.
El muchacho que supera estas crisis sale fuerte de ellas y necesita de estas metas para continuar.
Por ello valoramos las Inteligencias múltiples ( Gargner,1983), de cada individuo, y revisamos junto a el sus deseos y necesidades.
He realizado numerosos mapas conceptuales sobre las necesidades del alumnado con trastornos de conducta que pueden ser útiles para organizar unas pautas a modo de protocolo de actuación en los diferentes contextos en los que puede afectar un trastorno de conducta.TRASTORNO DE CONDUCTA
El concepto de trastorno en si mismo encierra la idea de desequilibrio, por lo que en lo referente a la conducta en etapas de niñez y adolescencia, podríamos definirlo como un desequilibrio personal-emocional que se refleja en una alteración de la conducta de manera continuada y que repercute en el sujeto que la sufre y en todos sus contextos, en la medida que esta deriva de leve a moderada y grabe.