En qué consiste la adaptación curricular cuando un niño tiene altas capacidades y cómo ha de aplicarse

Adaptación curricular para alumnos con altas capacidades

Sapos y Princesas, El Mundo, 7/03/2023

Hablar de niños con altas capacidades es hacerlo de un grupo heterogéneo de alumnos con puntuaciones más elevadas que el resto en pruebas de inteligencia general y de aptitudes. Algunos de ellos obtienen registros moderadamente superiores a la media, mientras que otros la rebasan considerablemente o incluso de forma extrema. Asimismo, podemos encontrar menores con habilidades muy desarrolladas para determinadas materias, si bien en otras no se observa tal contraste. Como veremos más adelante, la respuesta educativa que se debe facilitar a estos niños tiene que venir marcada por la prudencia. Una adaptación curricular siempre ha de producirse de abajo hacia arriba. O, dicho de otra forma, no hay que modificar aspectos académicos relevantes hasta que no se haya comprobado que funcionen otras adaptaciones de menor alcance.

En qué perfiles se subdivide este alumnado

Según los últimos datos oficiales disponibles, los del curso 2020-2021, estos estudiantes representan un 7,9 % del total y su presencia se concentra mayoritariamente en las etapas de Primaria (41 %), ESO (42 %) y Bachillerato (13 %). Pese a la extensa variedad de realidades que engloba el colectivo, el Ministerio de Educación y Formación Profesional diferencia entre los siguientes tipos de alumnado:

1. Superdotado

Combina los elementos propios de una inteligencia elevada con una alta originalidad y creatividad. Además, cuentan con la motivación necesaria para implicarse en el contexto académico hasta materializar su potencial.

2. Con talento

Presenta un alto rendimiento en una o varias áreas de conocimiento como la verbal, la creativa, la lógica, la matemática, la espacial, la social, la musical o la deportiva.

3. Creativo

Emplea lo aprendido en poner en práctica nuevos métodos efectivos para solucionar un problema determinado. Es decir, imagina las consecuencias de tal fenómeno y proyecta procedimientos que todavía no están controlados o planificados.

Adaptación curricular desde Educación Infantil
La adaptación curricular puede aplicarse desde las primeras etapas de la enseñanza | Fuente: Canva

4. Con maduración precoz

Experimentan un desarrollo más rápido que el resto de los estudiantes de la misma edad. Habitualmente, estos niños terminan igualándose al resto o limitan esa ventaja a algún área concreta, lo que los incluye en la categoría de talentos.

5. Genio

Se trata de alumnos que poseen una inteligencia considerablemente superior a la de los demás o que realizan aportaciones muy relevantes para la sociedad.

6. Brillante

Alberga un alto grado de capacidad tomando como referentes a personas que le rodean. Puede memorizar grandes volúmenes de información y registra un alto rendimiento académico.

7. Excepcional

Se aprecia una desviación de la media por encima del resto de individuos de su edad.

8. Con alto rendimiento curricular

Obtiene calificaciones altas, ya sea de manera general o en varias asignaturas concretas.

Qué es una adaptación curricular y qué tipos existen

Dado que las necesidades de este alumnado no coinciden con las de los demás, resulta esencial ofrecerles respuestas educativas específicas que puedan satisfacerlas. La propia heterogeneidad entre quienes poseen altas capacidades intelectuales exige, por otra parte, un profundo nivel de personalización en el procedimiento.

Otro aspecto fundamental antes de aplicar las ACAI, siglas que dan nombre a las adaptaciones curriculares concebidas para este colectivo, es la prudencia. En dicho sentido, deben implementarse primero diferentes medidas ordinarias de menor calado, como pueden ser las actividades de ampliación, los agrupamientos flexibles o, entre otras, la adecuación de recursos. Solo cuando tales herramientas no alcancen, se considerará adecuado acometer los procedimientos que nos ocupan, que se dividen en dos categorías:

Adaptaciones no significativas

Se limitan a ligeros ajustes en los contenidos o el sistema de evaluación, sin llegar a modificarse elementos básicos del currículo. Algunas de estas variaciones de carácter ambiental, organizativo o metodológico se materializan a través de determinadas alteraciones de los espacios, de las formas de presentar el material o de tiempos diferenciados con los requeridos al resto de estudiantes. Lejos de darse de manera ocasional, son muchos los alumnos que, en algún punto de su trayectoria escolar, requieren de este tipo de incentivo.

Adaptación curricular no significativa
Lo más habitual es llevar a cabo adaptaciones no significativas | Fuente: Canva

Adaptaciones significativas

Las adaptaciones significativas son bastante menos frecuentes y afectan a las materias, a los criterios de evaluación y a los objetivos generales de la enseñanza. En el sistema educativo español es necesario reflejarlas por escrito en un Documento Individual de Adaptación Curricular, también válido para alumnos con necesidades especiales o dificultades de aprendizaje.

Tanto en esos casos como en el de las altas capacidades, permite sistematizar y sintetizar toda la evolución académica, ofreciendo una oportunidad continua para reajustar los parámetros inicialmente establecidos. Sea cual sea el formato de un DIAC, en este se ha de registrar una serie de información básica que incluya:

  • Los datos de identificación del alumno.
  • Su historial personal y educativo.
  • Su nivel de competencia curricular.
  • Su estilo de aprendizaje y su motivación para aprender.
  • Su contexto escolar y sociofamiliar, para lo cual se recomienda la colaboración de los padres.
  • La fecha de elaboración del documento, la duración, las personas implicadas y la función que desempeñan.
  • Una propuesta curricular adaptada que conste de una provisión de recursos materiales, de ayudas personales y de una modalidad de apoyo.
  • Un seguimiento y una evaluación que permitan corregir las anteriores decisiones si el estudiante lo necesita.
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